
Uno de las más grandes bailarines del Siglo XX, coreógrafo, director de teatro y cine, actor, docente, artista, poeta y mucho más. Durante 30 años, fue bailarín principal del Ballet Bolshoi (1958-1988) y un intérprete superlativo con una inmensa versatilidad, poseedor de un raro talento artístico, encanto y virtuosismo. Premiado por la Paris Dance Academy con el título de El mejor bailarín del mundo, y por la revista Dancing Time como Le Dieu de la Danse (El dios de la danza), hizo una gran contribución al estilo clásico masculino, creó nuevos modelos y estándares, que forma-ron a varias generaciones de artistas, incluida la actual. Vasiliev declaró una verdad en el escenario que sobrepasó las fronteras temporales y nacionales, eliminó las limitaciones de tipo, género y plasticidad. Ya fuera el orgulloso Espartaco o el brillante Basilio, el tiránico Iván el Terrible o el sabio Zorba el griego, el ensimismado Narciso o el gentil Romeo, el amante de Albrecht o el alegre Ivanushka; era imposible no creer en su emocionalidad. Igual que es imposible imaginar a Vasiliev sin Maximova. Muchas grandes bailarinas bailaron con Vasiliev, entre ellas las eximias Galina Ulanova, Maya Plisetskaya, Alicia Alonso, Carla Fracci, pero su dúo con la recordada Ekaterina Maximova sigue siendo un ejemplo inigualable de asociación en el escenario y en la vida real, reconocido por Paris Academy of Dance como El mejor dúo del mundo. Desde 1971, Vasiliev trabaja como coreógrafo y director. Ha creado 13 ballets para las mejores casas líricas del mundo, como los teatros Bolshoi y Mariinsky, Metropolitan Opera, Opera di Roma, Staatsoper Berlin, Teatro San Carlo, Teatro Colón, Tokyo Bunka Kaikan, Coloseum y Barbican Centre. Entre ellos, los ballets Icarus, Macbeth, Cinderella, Swan Lake, Don Quijote, Giselle, Nutcracker, Anyuta, Red Poppy, Fragments of One’s biography; las óperas Traviata, O, Mozart, Mozart y la reciente y grandiosa producción Dona Nobis Pacem (danos la paz), con la Misa en Si menor de Bach, para solistas, coro, ballet y orquesta; así como coreografía para óperas, incluyendo Aida y Traviata con puesta de Franco Zeffirelli en Ópera di Roma, y Aida en Arena di Verona y La Scala; asimismo para ópera rock, teatro y películas, puesta en escena y grabación televisiva de ballets originales.
Durante diez años dirigió el curso de maestría de ballet en el Instituto Estatal de Artes Escénicas (GITIS) y dirigió la Facultad de Coreografía del Instituto, siendo elegido como profesor en 1990. Desde 1995 hasta 2000, Vasiliev fue Director General y Artístico del Teatro Bolshoi, donde en los años 90, en Rusia, conservó y desarrolló sus mejores cualidades y tradiciones. Actualmente, tiene una gran demanda como coreógrafo, actor, artista y presidente de muchas prestigiosas competiciones de ballet, es el fundador y patrocinador de la Escuela de Ballet Bolshoi en Brasil.
Vasiliev es un hombre de muchas facetas: actor, poeta y pintor. La pintura se convirtió en su segunda vocación y durante los últimos veinte años realizó treinta exposiciones individuales de sus obras; diseñó también sus producciones de ballet, en su país y en el mundo. Fue galardonado con los más importantes premios y títulos de la URSS y Rusia, Francia, Japón, Italia, Estados Unidos, Brasil, Lituania, Cuba y UNESCO. En los años 80 Vasiliev bailó en el Teatro Colón y en el Luna Park como estrella invitada y en giras; y fue el primero en crear y presentar en el Teatro Colón un ballet sobre el tango Fragmentos de una biografía, lo cual le concedió el amor del público argentino y el título de Ciudadano Honorario de Buenos Aires.